LOS FASCINANTES DELFINES - portadores de energía
curativa- que algunos piensan que poseen su propia cultura, y ahora
descubiertos como portadores de una energía curativa que ha dado pie al
desarrollo de una nueva forma de terapia, los delfines saltan del mar a nuestro
Templo del Cuerpo, invitados como sanadores.
Una nueva forma de terapia:
Delfinoterapia
El interés actual por
los delfines sería una especie de redescubrimiento para el hombre moderno, que
hoy renueva con entusiasmo el estudio de esta especie, en especial al saber que
poseen una sorprendente capacidad curativa para el hombre, sobre todo en el caso
de los discapacitados mentales. Estamos hablando de una nueva técnica
terapéutica que hoy se conoce como "Delfinoterapia". Pero, ¿cuál es su
origen?
A principios de los años cincuenta, el norteamericano
John Lilly descubrió que los delfines pueden ejercer una influencia poderosa y
positiva sobre la mente humana. Lilly trabajaba entonces sobre la neuroanatomía
de estos cetáceos en colaboración con la Marina norteamericana cuando, gracias a
unos experimentos que incluían la observación del comportamiento de su propia
mente en unas cámaras de aislamiento especialmente diseñadas, pudo llegar a la
conclusión de que los delfines se encuentran en estado meditativo las 24 horas
del día.
Paralelamente, estableció un sistema bidireccional de
comunicación con los delfines creando un interfaz informatizado, por cuanto el
proyecto suponía que el lenguaje de los delfines estaba basado en imágenes
sónicas.
Con los sonidos emitidos por aquellos se creaban
imágenes computerizadas que posteriormente eran analizadas por especialistas
para poder diseñar una cadena de respuesta a los delfines a través del
ordenador, y de ese modo crear un lenguaje que hombre y delfín pudieran
entender. Y así, tras años de investigación, se llegó a confeccionar el primer
diccionario electrónico bilingüe (inglés ó lenguaje de los delfines) compuesto
por unas 50 palabras.
Junto a otros eminentes científicos, Lilly contribuyó
a la elaboración del libro "Mind in the waters" que sentó las bases de un
revolucionario concepto: la existencia de otra mente parecida a la nuestra. Esa
interrelación entre esa mente y la del hombre es lo que ha abierto la puerta a
la Delfinoterapia. Los doctores Horace Dobbs y David Nathanson, en Escocia y
Florida, respectivamente, comenzaron hace unos 20 años a estudiar el efecto de
los delfines en personas con padecimientos emocionales, síndrome de Down y
autismo.
Cuenta el Dr. Dobbs que en 1974, en las costas de la
isla de Man, él y su hijo conocieron un delfín que llamaron Donald. El delfín
llevó al chico a dar un paseo por todo el puerto, cuidando de mantenerlo fuera
del agua, y la emotiva interacción entre ambos cambió la vida del Dr. Dobbs, que
cada vez se aficionó más a la natación con los delfines y menos a su
laboratorio. El océano fue a partir de entonces su centro de investigación, y
encontró que las personas con depresión crónica o anorexia nerviosa podían salir
de su trastorno con la compañía alegre y amistosa de los delfines.
Desde 1986 en el Oceanarium del estado de Ucrania,
situado en Sevastopol - Crimea, un nuevo campo de investigación se viene
desarrollando por un grupo de científicos encabezado por el Dr. Ludmila Lukina.
Cada año, durante el verano, niños y adultos con distintas discapacidades han
recibido sesiones de delfinoterapia. Ellos informan de que sienten mejoramiento
en su humor, bienestar, vitalidad y un aumento en la capacidad para trabajar.
Algunos también sienten que desaparecen los síntomas de sus enfermedades después
de nadar con los delfines. Los resultados de estas investigaciones se han
publicado en el Simposio Internacional de Medicina en Gurzuf (1992), y en Moscú
(1995), y en otros Congresos como el de Turquía (1996) y Gran Bretaña (1998). La
delfinoterapia ha recibido una amplia aceptación por parte de la comunidad
científica, haciendo notar su alta eficacia y su gran futuro como método de
tratamiento.
No cabe duda de que entre todas las criaturas marinas,
el delfín es uno de los preferidos, tanto por los niños como por los adultos,
que ven en ellos a unos seres próximos y amigables a los que se atribuyen
cualidades de todo tipo. Algunos terapeutas que recomiendan la natación junto a
delfines como eficaz tratamiento del estrés o la depresión, e incluso hay
médicos, como el soviético Dr. Tcharkovsky, que recomiendan a las mujeres
embarazadas que mediten o hagan ejercicios de relajación en presencia de
delfines (últimamente, incluso, se han dado varios casos de partos en el agua
junto a ellos), porque al parecer, los delfines podrían entrar el contacto
telepático con los bebés que van a nacer o los recién nacidos. Las madres que
han vivido esa experiencia del parto bajo el agua junto a delfines, aseguran que
ha sido muy gratificante, casi 'mágica', y que han sentido una felicidad casi
inenarrable. Casi todo lo relacionado con el mundo de los delfines sigue
siendo un misterio, pero ya se conocen algunas cosas. Por ejemplo, que son mucho
más inteligentes y están más evolucionados que los mismos seres
humanos.
Su cerebro es el mayor de la creación y está mucho más
desarrollado que el del hombre. Poseen sentido ultrasónico, un sonar muy
perfeccionado con el que pueden orientarse, conocer lo que tienen delante e
incluso "ver" a través de la materia, como en una ecografía. Tienen además un
sentido del tacto muy desarrollado, por lo que adoran las caricias y el
contacto. Hay científicos que están enseñando a los delfines un lenguaje de
gestos con gran éxito, ya que éstos comprenden no sólo las palabras, sino
también la sintaxis, el orden de las frases silbadas o gestuales.
n la Universidad de Hawai se
intenta la comunicación con estos cetáceos, basado en silbidos producidos por un
ordenador, similares a los que ellos emiten. En una cala de Cadaqués, Girona,
funciona desde hace un tiempo el primer centro de delfinoterapia de España. La
nueva y revolucionaria técnica curativa está ofreciendo resultados
sorprendentes, y muchos niños con discapacidades, especialmente autistas y con
Síndrome de Down, han experimentado grandes progresos en su contacto con
ellos.
Ángeles
del Mar
Maravilloso¡¡¡ los veo y me
ven y en esa mirada el mensaje susurrado en la armonía de notas murmullos amados
que abrazan el planeta en la conjunción viva e inmaterial de ángeles de silencio
que en la rueda magnífica de su encanto nos dan toda la gama de vibraciones
celestiales entre las olas- las lágrimas.
Se congelan en los ojos, pájaros
volando hacia las esferas de amor, conjunción de cielos y tierras y en el
centro, como un corazón palpitante ,la tierra herida no se cansa de parir, las
cuatro fuerzas aunadas en las magníficas auroras de las vidas.
Me pronuncio por la alegría de la
luz y decreto a los puntos del centro donde las imágenes no son ,yo soy la vida
en mi, te doy mis manos de amor Madre Luz, Mdre Amor,Madre Tierra me pronuncio
por la paz.
Que los ángeles del mar canten su
paz-armonía. Que la madre naturaleza despliegue sus hermosas criaturas en un
renacer siempre todos uno mas allá de la
ilusión.
Cuando invitamos a los ángeles a entrar en nuestras vidas, evolucionamos espiritualmente. Los ángeles esperan nuestra llamada, quieren ayudarnos en
todo lo que hacemos. Los ángeles dan lo mejor de si mismos y dirigen su amor hacia cada uno de nosotros, nos ayudan a elevar nuestra frecuencia vibratoria. No es necesario ser clarividente para sentir la brisa de los ángeles, solo tienes que querer sentirlos en tu vida. Míralos a través de los objetos, tus piedras, en las nubes, en las palabras, en los bebes y en todo aquello que despierte en ti una sensación de bienestar y paz. Dicen que las plumas blancas son ángeles y que si encuentras una la debes guardar ya que eso te permitirá tenerlo mas cerca. Yo cada noche cuando me voy a dormir, pido a mi ángel que me permita recordar mis sueños, ya que en ellos hay muchos mensajes, y te puedo garantizar que funciona.